Castell de pallargues

El castillo

Pallargues y su castillo

Documentado en el siglo XI con el nombre “Espallargues”, fue reconstruido en la época gótica, tal y como ocurrió en la mayoría de castillos de la zona, dejando la función defensiva por la residencial, convirtiéndose así en Castell Palau. La majestuosa arcada gótica de trece metros de la fachada es su seña de identidad. Condes, varones, marqueses, campesinos, criados, vasallos… forjaron la historia todavía viva del Castillo de las Pallargues. 

La familia Rovira, actuales habitantes y propietarios del Castillo, es la que hoy nos deja visitar parte de sus dependencias y disfrutar de un plácido paseo por el pasado de todos estos mil años de historia. Estancias que nos transportarán a la vida cotidiana de los Señores del Castillo: la entrada, la bodega, la cocina, la sala principal, la capilla, la cárcel… y que harán que sea una visita inolvidable.

En medio de la población de Les Pallargues ya pocos metros del ayuntamiento, surge de improviso al penetrar en una calle relativamente estrecha, el castillo de Les Pallargues.

Una población en la que hoy en día se capta aún ese aire de paz y tranquilidad que debió de transpirar a lo largo de su existencia.

Se documenta desde 1061 que se le denominaba de “Espallargues” en referencia a los pajares. Durante 1315 su propietario era Berenguer de Rajadell y un año más tarde lo sería el señor de Concabella que lo sería durante una parte del siglo XIV y parte del XV. Este castillo que se construyó en un emplazamiento aislado y en lo más alto junto al río Sió, poco a poco se vio rodeado de casas a su sombra hasta formar un núcleo urbano. Al parecer, alrededor de 1636 ya se habían reunido unas 23 casas junto con unas murallas que las rodeaban. Pertenece a cuyo tipo de castillo-palacio abundan en la comarca de La Segarra. Es de planta muy irregular y lo forman tres polígonos de diversas medidas seguramente por haberse ampliado en varias ocasiones con una gran fachada.

El cuerpo central que corresponde al más antiguo contiene un impresionante arco gótico de trece metros. Los restantes cuerpos corresponden al siglo XVI. El balcón añadido posteriormente hace unos 200 años, le permite tomar un aire de majestuosidad. No sería ésta la última transformación, la guerra civil y la ocupación militar que tuvo que sufrir y dos bombardeos posteriores, fueron transformándolo hasta adquirir el aspecto actual.

El castillo en su interior está distribuido de la siguiente forma; en planta baja están ubicadas las dependencias destinadas a los servicios: cuadros, utensilios tradicionales y la antigua sala de guardia. Siguiendo por una escalera de piedra se llega a la planta noble, presidida por la Sala Capitular, espacio sobrio y elegante de puertas muy trabajadas y comunicada con la capilla de Sant Miquel, pudiéndose admirar Argençola, una de las antiguas familias propietarias del castillo. Coinciden con esta sala el antiguo dormitorio y la terraza desde la que se contemplan unas extraordinarias vistas de la Segarra. Para los visitantes curiosos vale la pena no perderse la escalera de caracol que conduce a los calabozos, el pozo de agua, la bodega de grandes botas y el pozo descubierto recientemente, excavado en la misma roca del que nace cristalina agua. Cabe resaltar que el castillo de Les Pallargues nunca ha sido deshabitado.

Español